Jorge Coscia, titular de esa cartera de ese organismo del gobierno, fue denunciado por presuntos desmanejos en el control de los subsidios al frente de su cartera y como encargado de la conducir del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) entre los años 2002 y 2005.

"Los cheques salían de la Tesorería de INCAA (...) y se cambiaban por dinero en lugares bautizados como 'cuevas' y con el dinero en mano se formalizaba un reparto entre 'los beneficiados'", dice la presentación del abogado Ricardo Monner Sans, titular de la Asociación Civil Anticorrupción.

El letrado anticipó que aportará como prueba 385 fotocopias que prueban estas supuestas irregularidades. Según se pudo saber, en ese material aparecen 11 millones de pesos destinados a dos productoras llamados Aleph Media y Daltel, vinculados al propietario de Página/12, Fernando Sokolowicz, para la realización de cortometrajes sobre el atentado a la AMIA y la historia de América Latina.

Según Monner Sans, esos fondos "retornaban" en parte al propio Coscia y su colaborador Fabián Blanco, su abogado Oscar Azar y Víctor Ramos: "El dinero que parecería cobrado por Coscia, salía por un circuito especial hacia los Estados Unidos de América, donde vivía o vive un hermano suyo. Retornaba el dinero a favor de Jorge Coscia, como aparente préstamo del hermano y de la madre de Jorge Coscia (...) una de las llamadas ‘operaciones de blanqueo'".